Y es que,¿No se han preguntado nunca como acaban siendo las cosas lo que son?¿Que podrían haber acabado siendo?¿Que posibilidades se presentaron en su momento o cuales podían haberse presentado? Todo lo que pudo ser y no fue.
La maravillosa mente humana es capaz de imaginar, de evocar, de fantasear con una parte de la infinitud de posibilidades de lo que pudo haber pasado, de lo que podría estar ocurriendo y de lo que podría pasar en un futuro próximo o lejano. En ello se basan innumerables muestras de la literatura, películas, historias... Todas basadas y girando alrededor del ¿Que pasaría si...?. Sin embargo la verdadera magnitud de la infinitud de probabilidades es inconcebible para nuestra mente.
Aunque no lo parezca por lo que llevo escrito hasta ahora, vengo a hablarles de sueños, de sueños infinitos, de sueños perfectos.
Si buscan la definición de estos términos en Internet, probablemente no encontrarían nada, y seria lógico dado que me lo acabo de inventar. Lo aviso ahora, muchos términos que voy a utilizar son completamente inventados, pero yo( y tal vez quien lea esto si consigo explicarme) le encuentro sentido.
A ver, la vida(estado de vigilia) puede definirse como el espacio entre un sueño y otro, y en cada sueño nos inventamos una realidad alternativa o no que no distinguimos.¿Porqué la vida no iba a ser otro de esos sueños?. Pues bien los mencionados sueños infinitos, perfectos e inacabables son la vida que vivimos. Nuestra vida es un sueño del que despertamos para encontrarnos con otra vida, la vida perfecta. Pero esta vida, a su vez, es también el espacio entre los sueños perfectos, que continúan hasta el infinito viviendo en cada uno de ellos todas y cada una de las posibilidades de las que hablaba al principio.
Esta idea es similar a la hipótesis física de los universos paralelos en la que entran en juego la existencia de varios universos o realidades relativamente independientes, con la diferencia de que, según esta idea, no compartiríamos un mismo espacio ni universo físico, sino que cada uno viviría inmerso en su infinitud de sueños personales. La única conciencia real de cada sueño sería la del propio soñador, que tendría claro que él por lo menos(como diría Descartes)existe, dado que piensa.
También difiere de la hipótesis de los universos paralelos en que, al tomar una decisión, no se crean varios universos en los que se eligen diferentes opciones, sino que todas las opciones que se toman durante el sueño están determinadas desde antes de empezarlo, difiriendo unos sueños de otros desde las cosas mas importantes hasta las mas nimias.
Tal vez el estado de vida perfecta entre sueño perfecto y otro consista en eso, en configurar el conjunto de decisiones que se tomaran durante el sueño, pero esto, al igual que toda esta hipótesis rara, es solo una suposición que casi ni yo me trago.Ni falta que hace, porque como digo esto es solo una teoría, que puede ser o no cierta y en la que no creo ni dejo de creer.
Asi pues, espero no haberlos mareado mucho con toda esta explicación y recomendaros no comeros la cabeza pensando en lo que podría ser vuestra vida, aunque fuera verdad esto, no vale la pena amargarse intentando buscarle una explicación, solo disfrutar de la vida que de verdad sabes que estas viviendo y vas a vivir, esta.
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